EMPALMES DE CINTAS ELEVADORAS
El empalme de las cintas
elevadoras se realiza en formas y tipos diferentes.
En general,
el uso de uno u otro tipo de empalme está
caracterizado por el servicio y la experiencia recogida.
SUPERPUESTO:
Es aquel utilizado en cintas con bajas tensiones de
servicio en el cual una parte de un extremo se superpone
al otro en una longitud al menos igual al ancho de la
cinta.
Se recomienda verificar la proyección
del cangilón en la zona del empalme debido al
mayor espesor de la cinta. En general se utilizan los
mismos bulones del cangilón para lograr el empalme.
El sentido de empalme es aquél en que el lado
de cinta de polea queda orientado contrariamente al
sentido de marcha para evitar el ataque directo a la
polea.
YUXTAPUESTO:
Utilizado para cintas de poco espesor. Se unen a tope
los extremos de la cinta, colocándose sobre ellas
otra fracción de cinta de igual ancho y de largo
tal que tome al menos un cangilón por lado. Al
igual que el anterior, la proyección de los cangilones
se verá incrementada en el espesor de la cinta
agregada.
VULCANIZADO:
Al igual que en las cintas transportadoras, se utiliza
cuando los rangos de tensión son elevados. El
procedimiento de empalme es igual al descripto en aquel
caso.
METÁLICO:
Se usarán broches metálicos convencionales
en el caso de que las tensiones de trabajo no superen
el 50 % de la norminal de la cinta. Proveen un servicio
más silencioso que en casos de juntas superpuestas
o yuxtapuestas.
EN ÁNGULO:
Es un empalme muy práctico, teniendo el diseño
del ángulo variadas dimensiones de acuerdo a
la norma a utilizar. Su funcionamiento es silencioso
y el radio de doblado está determinado por el
espesor de la cinta.
EN CANGILÓN:
La unión entre los extremos de la cinta la realiza
el mismo tornillo que sujeta el cangilón. Se
utiliza en condiciones de trabajo de baja exigencia.